- Área: 100 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Federico Kulekdjian
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Proveedores: Estudio Cemento, Kohen, Pickmeflowers, Pimux, Quadri, colucci equipamiento, hilaria luz
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Rebelión es una cantina ubicada en el barrio de Palermo, en la ciudad autónoma de Buenos Aires. Su nombre completo, Rebelión – Cantina del Bien, habla de dos grandes virtudes que los define, según sus dueños. Cantinarepresenta en su parte gastronómica, el uso de materia prima fresca, productos de la huerta, proveedores locales y sabores del mundo en propuestas sencillas y bellas. Del Bien, representa otra gran faceta de Rebe, la que ellos denominan magia. Esta tiene que ver con el concepto central de espiritualidad y lo esotérico, y como transmitir ese mensaje a través del servicio diario.
Otra gran característica que define su esencia es la historia edilicia. Rebelión adquirió una identidad generada por añadidura y sumatoria de elementos a lo largo de su vida, logrando una identidad difícil de crear desde una hoja en blanco. La sumatoria de historias, estilos, productos, espacios, decoraciones y ambientaciones, generan un carácter único, casi ecléctico, que conviven en perfecta armonía, logrando un resultado que es muy difícil de repetir. La huella histórica que atestigua la construcción edilicia de casi 100 años, con varias modificaciones a lo largo del tiempo, terminan de crear la magia de sus espacios. Este proyecto fue un encargo de reforma, que presentó principalmente 3 grandes desafíos. El primero, reinventar la marca realizando el rebranding completo de su identidad sin dejar de transmitir su magia distintiva. En segundo lugar, optimizar su layout, reordenando programa y funciones, sin perder la esencia de sus espacios. Por último, y no menos importante, lograr reformar 120 m² dejando sin servicio a la cantina por un máximo de 45 días.
Los requerimientos del comitente, en lo que respecta a lo funcional del local, eran principalmente aumentar la superficie del espacio productivo y modificar la diagramación del local, sin perder capacidad de cubiertos de la cantina. La propuesta arquitectónica agrandaría el espacio productivo de cocina, integrándola al local a través de un cerramiento traslucido, mejorando la circulación del personal entre la cocina y el salón, agilizando de esta manera la entrega de comandas y el desbaraso. También se vincularía de manera más directa la cocina con la nueva barra de atención al público, optimizando las tareas del personal. Además de esto se incorporó un nuevo depósito de materia prima dentro de la cocina, un sector independiente para el depósito de basura, y una entrada independiente desde la vía pública al sector productivo, destinada al ingreso de proveedores y egreso de residuos.
La nueva barra de atención al público fue diseñada como el nuevo elemento que unificaría espacios y simplificaría criterios espaciales del Rebelión, atravesando todo el salón, conectando la cocina directamente con la vereda, brindando apoyo y conexión continua a los clientes. Este elemento rectilineo, de gran presencia por su simple morfología lineal, y revestido en su completitud por el mismo material, unificaría y conectaría espacios de distintas escalas, funciones y materiales.
En esta nueva pieza se conglomerarían programas como: atención al público y cobro, cafetería, sector de barra con banquetas, coctelería, expendio de agua filtrada y cerveza, lavado y depósitos de vajilla, y entrega de productos a través de la nueva ventana take away conectada a la vía pública. También se incorporó la exhibición de pastelería fría, panificados, vinos, bebidas envasadas y distintos tipos de productos. Acompañando la linealidad predominante de este elemento, la barra se complementó con un mueble de apoyo y estanterías de la misma longitud que la barra, acompañadas con iluminación lineal y vegetación seca.
Los baños fueron diseñados con la idea de transmitir, a través de estos espacios, el concepto de magia que rebelión había logrado manifestar. El local contaba con 3 baños, uno en planta baja y dos en el primer piso. El baño ubicado en el nivel cero, fue pensado como el baño “tierra”. Este ambiente habla del sentido de permanencia del ser humano, de poner los pies sobre la tierra, de lo tectónico, de la construcción. Nos recuerda que estamos presentes aquí y ahora, en este planeta que habitamos y del cual venimos.
El espacio se concibió como la representación de un bosque o selva, donde uno se siente con los pies en la tierra, envuelto por densa vegetación y variedad de vida. Para revestirlo, se diseñaron placas de terrazo partidas, simulando la textura de tierra seca resquebrajada, cubriendo piso y parte de las paredes. El resto de las superficies, tanto las paredes como el cielorraso, fueron intervenidos por una artista muralista que recreó imágenes abstractas de texturas de bosques, hongos, y diferentes tipos de especies de vegetación e insectos, fusionándose hacia el techo logrando la sensación de mirar hacia el cielo inmerso en un bosque.
Para completar la ambientación del espacio, se diseñaron artefactos de iluminación en moldes de resina traslucida que recrean hongos emergiendo de la vegetación. El diseño de los baños del primer piso se concibió como una propuesta pensando en una instancia elevada hacia el conocimiento y la sabiduría. Exploramos conceptos como la búsqueda de la verdad, la felicidad, la creación y los orígenes. Ambos baños proponen lo mismo, pero desde dos perspectivas que podrían resultar antagónicos en la actualidad: la espiritualidad y la ciencia. El diseño del baño “magia”, inspirado en tonos azules y dorados haciendo referencia a lo celestial, invita a la persona a contemplar su esencia a través de los astros desde el centro del espacio. En cada una de las cuatro paredes están ilustraciones de los elementos del zodiaco (agua, aire, fuego, tierra), personificados como guardianas. En el cielorraso, simbólicamente orientado hacia las estrellas, se representa el sistema solar con los signos astrológicos y sus constelaciones, creando una atmósfera envolvente de conexión con el cosmos.
El baño “ciencia”, fue concebido como una grilla tridimensional de planos. Dos muros opuestos, pisos y cielorraso, están revestidos con cerámicos cuadrados negros con junta fluorescente, creando cuatro grillas regulares que evocan al diagrama matemático de un plano. Estas cuadriculas representan una abstracción de las cuatro dimensiones de la teoría de la relatividad. En las dos caras enfrentadas restantes del baño, se colocaron paneles completos de espejos que reflejan las cuatro grillas, recreando la deformación tiempo y espacio. Cuando uno se encuentra en el centro del baño, queda inmerso en una cuadrícula infinita que simboliza la búsqueda del origen del universo por parte del ser humano.
Acompañando la esencia de los productos locales y naturales de la cantina, se pensó el local con una selección de materiales de las mismas características, realzando la cualidad de autóctono y original. La barra fue revestida con terrazo rustico de proveedores locales, presentado en lonjas verticales y tonos crudos, acompañando los tonos claros del interior. Para pisos y revestimientos se utilizaron mosaicos graníticos de fabricantes locales, añadiendo texturas que mantengan la heterogeneidad de rebelión, pero unificando criterios en su forma de elaboración y en los tonos utilizados.
Para los baños se complementaron bachas y revestimientos de terrazo, cerámicos y murales de artistas argentinos logrando espacios con identidades únicas. La barra y el sector en doble altura de la escalera, fueron ambientados con vegetación seca de especies variadas de la región, añadiendo calidez y acompañando la misticidad de los espacios. La cartelería de Rebelión fue realizada mediante una técnica tradicional a mano, para mantener la esencia natural y rustica del local.
La iluminación general del local fue lograda con distintos tipos de artefactos dependiendo la ubicación, elaborados por artesanos locales en materiales como el cemento, fieltro, telas y resinas. Para ventanales y cerramientos interiores, se trabajó con herreros recreando el tipo de carpintería repartida original del inmueble, utilizando perfilería de hierro y vidrios con relieve. Finalmente se generaron entradas de luz natural en techos existentes, para darle un mayor impacto visual al espacio de escalera en doble altura y vegetación escenográfica que acompaña.
Luego de la intervención realizada por arquitectos, ingenieros, diseñadores, artesanos, artistas y cocineros, Rebelión se transformaría en un lugar donde la magia se sigue expandiendo a través de altares, sabores, aromas y espacios ricos en texturas con una historia que contar. Su nueva identidad holística unificaría criterios resaltando su peculiar estilo, reforzando su carácter de cantina del bien.